Brasil vive en un "boom" inmobiliario sin precedentes, con millonarias inversiones de dinero público tanto como de privado. En un principio no parece que pueda suceder la famosa burbuja inmobiliario que sacudió EEUU y España, para ello, toman medidas las autoridades brasileñas.
Hace unos años, solo las clases altas y medias brasileñas eran capaces de comprar una vivienda, ahora un ciudadano que cobra el mínimo también puede adquirir una, gracias a la saturación de hipotecas que se está viviendo en el país. Esto se debe al programa "Minha casa, mhina vida" que creó el gobierno de Lula da Silva en 2009 y que consiguió que millones de personas tuvieran una digna casa, ahora, se pretende poner en marcha una segunda fase de ese programa para sacar de las favelas a otros millones de personas.
Desde la Universidad de Sao Paulo tienen claro cual es la causa de este boom, y no es más que el crecimiento sistemático en la economía desde 2004, este crecimiento atrajo a los inversores extranjeros y la estabilidad y la confianza existente en el país hace que los ciudadanos piensen en comprar una casa bien para vivir o para invertir, estos últimos compran una segunda vivienda, lo que hace que suban los precios.
Bajos interesas, créditos a largo plazo, seguridad jurídica e iniciativa privada dispuesta a invertir son las causas de este fenómeno.
Desde Brasil no se cansan de decir que este boom inmobiliario no tiene nada que ver con el de EEUU, ya que aquí se están dando hipotecas a gente que pueda pagarlas, y además no existe especulación.
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